La esposa de Alfredito y todo un fenómeno de la naturaleza. Elsa Pon Prieto es una mujer explosiva, intensa y completamente impredecible. Dueña de un carácter arrollador y una personalidad que oscila entre la ternura y el drama extremo, es la auténtica “Toxic Queen”. Siempre está al acecho de algún muchachón y maneja sus relaciones amorosas como si fueran una telenovela de alto voltaje. Su carisma y locura hacen de cada día una auténtica aventura.

Un maestro del engaño y la trampa, El Lacra es el mecánico más astuto del vecindario. Su especialidad no es solo arreglar carros, sino también encontrar la manera más rápida y desvergonzada de llenarse los bolsillos. Su taller es un lugar donde la picardía y los negocios turbios van de la mano, y ningún cliente sale sin haber sido víctima de su astucia. Para él, la honestidad es opcional, pero la viveza es su mejor herramienta.

Un suegro fuera de serie, con gustos que sorprenden y una mentalidad más joven que la de su propio yerno. El Boni es un fanático del reguetón, la moda y los programas de televisión “calientes”, siempre con el control remoto en mano y acompañado de sus misteriosas “pastillitas mágicas”. Vive su vida como un eterno adolescente, sin perderse ninguna tendencia y con un toque de descaro encantador.

El pequeño prodigio del vecindario, Nano es un niño cuya inteligencia desafía toda lógica. Su forma de hablar deja a los adultos rascándose la cabeza, mientras él explica con facilidad teorías complejas y conceptos que están muy por encima de su edad. No hay pregunta sin respuesta para Nano, aunque muchas veces lo que dice es demasiado avanzado para los simples mortales que lo rodean.

Un espíritu libre y un maestro de la contemplación, Mameluco ve la vida desde las alturas… literalmente. Con su inseparable toque jamaicano y su actitud relajada, prefiere pasar sus días en un estado de “alta” iluminación, reflexionando sobre los misterios del universo. Para muchos, sus pensamientos son un enigma; para él, son revelaciones profundas que nadie más parece entender.

Claudio es la encarnación del drama, el estilo y la extravagancia. Con una personalidad desbordante de purpurina y glamour, este cubano es el alma de cualquier fiesta. Su frenillo roto le da un sello único a sus conversaciones, convirtiendo cada palabra en un show por derecho propio. Si hay un lugar donde pueda brillar con su actitud fabulosa, Claudio estará allí para robarse el protagonismo.